La metrología es el lenguaje común de todo laboratorio, incluido el clínico, porque hace comparables y confiables las mediciones que sustentan decisiones técnicas y clínicas. Según el Vocabulario internacional de metrología, es la ciencia de la medición y su aplicación abarca e incorpora los aspectos teóricos y prácticos de medir en cualquier campo. Este enfoque trasciende ámbitos y se aplica en la industria de alimentos, en el sector farmacéutico y en el área ambiental, todos con impacto en la salud. Así, los datos generados en contextos distintos pueden interpretarse con seguridad, seguir tendencias y evaluar cambios con relevancia clínica.
Aplicada al laboratorio clínico, la metrología implica trabajar con unidades del Sistema Internacional, asegurar la trazabilidad de los resultados y estimar la incertidumbre con criterios explícitos. También exige el uso de materiales y métodos de referencia reconocidos internacionalmente y la alineación con normas como la ISO 15189, junto con marcos para ensayos in vitro como ISO 17511 y los recursos del JCTLM. Esta articulación fortalece la comparabilidad entre equipos, sitios y periodos, y respalda la validez clínica de los informes.
Este libro traduce esos principios a la práctica cotidiana del laboratorio. Ofrece criterios para seleccionar y verificar equipos, procedimientos claros para documentar la confirmación metrológica y orientaciones para calcular la incertidumbre. Las magnitudes y técnicas tratadas se eligieron por su uso transversal en salud y en áreas afines; por ello se profundiza en pesaje, preparación volumétrica con micropipetas con énfasis en la calibración gravimétrica, medición de temperatura y pH, y verificación del desempeño en espectrofotometría UV-vis. El resultado es una guía precisa para estudiantes, docentes y profesionales que invita a medir mejor para decidir mejor, con resultados trazables que respaldan la atención del paciente y favorecen la comparabilidad entre sectores.