Resulta llamativo que el esqueje vegetal lleve también el nombre de "hijo". En esta trasposición late el estudio de la cualidad germinativa de los cuerpos humanos y vegetales: la porción de latencia (semilla, raíz) encuentra tanto tierras fértiles como yermos en los que la palabra (y la hoja, y el tallo) no posee el sustrato nutricio para enraizar. Gabriela Peña-Valle consigue en su Botánica familiar una aproximación a esta fisiología comparada trenzando vegetalmente orígenes, conflictos y savias que animan, en un multicolor jardín, el abigarrado paisaje que llamamos "hogar".