Wyatt Murphy es conocido en el mundo paranormal como el defensor de los inocentes. Un humano que fue criado por un cambiaformas lobo, lleno de pasión y, tal vez, demasiado altruista que lucha por todo lo bueno y respetable, pero que también tiende a meterse en problemas.
«Polos opuesto se atraen», para ambos estas palabras carecieron de sentido… hasta ahora.
Como el Pakhan de la Bratva, una de las ramificaciones de la mafia más importante de Europa, Yaroslav se acostumbró a ser temido, obedecido y odiado. Su palabra es ley, una sola mirada suya significa la muerte.
El destino no puede ser tan desalmado.
Cuando Wyatt se entromete en los negocios de la Bratva, sabe que pondrá su vida en peligro. Por lo que, cuando es secuestrado por mafiosos, él está preparado para morir; no para encontrar a su compañero. ¿El problema?: es ruso y es el maldito líder, pero sobre todo es un felino. Y, aunque Wyatt no tiene nada en contra, él quiere un lobo.
Sin embargo, Yaroslav no es de los que se rinde. Él ha encontrado a su compañero y lo quiere, así que lo tendrá, aunque tenga que cazarlo… igual que a una presa.