Lope es un joven capitalino, veinteañero, con opiniones políticas y sociales de derechas que busca sobrevivir en un país regido por la izquierda. Lo que comienza como un simple comunismo se va convirtiendo, poco a poco, en un socialismo tercermundista que afecta su vida, su libertad y su futuro.
Su impertinencia, altanería y franca sinceridad lo llevan a ser condenado por un Delito de Opinión. Pero, aunque Lope es sentenciado a ser recluido en un penal durante cinco años por ese delito, su abogado consigue que más bien sea confinado durante ese tiempo en una aldea lejana y olvidada de Dios.
En esa aldea comunista, Lope no pierde oportunidad para dejar claras sus creencias y su forma de pensar, y aun así consigue hacer amigos. Allí debe aprender a trabajar la tierra para poder comer, a buscar agua del pozo y a entretenerse como cualquier aldeano de pueblo, sin ningún avance tecnológico del siglo XXI.
Así que Lope ya no sabe qué hubiera sido peor, si quedar recluido en un penal, sin tener que preocuparse por el entretenimiento de la vida, o si salir de esa jaula de oro para volar en relativa libertad y en la incertidumbre de la vida libre. «¿Mejor pájaro enjaulado, con el comedero lleno, o libre mejor, con el cielo arriba y la tierra abajo?».
Juan Ignacio Villarías estudió en los institutos de Santoña y Laredo, en la Escuela Normal de Magisterio de Santander, en la Escuela de Ingenieros Técnicos de Santander, en la Universidad de Valladolid, en la Escuela de Idiomas de Santa Cruz de Tenerife. No acabó ninguna carrera. Fue empleado de banca, entrenador de fútbol, profesor de instituto, dirigente deportivo y juvenil, profesor de alemán y de italiano, corresponsal de prensa, tuvo un restaurante, y tiene una agencia de viajes.
