"Justo después de haber cobrado vida, Harrold, quien por motivos de argumento pasa a ser la letra R pintada con spray en una pared, abraza las maravillas de la existencia y lo que realmente significa ser amado.
Harrold con una R es una fábula para niños y adultos por igual; una historia que es tan linda como lo es de entrañable, y que es tan simple en su mensaje para los niños como lo es de profundo y filosóficamente complejo para los adultos que lo leen - sea en audaz o dramática voz, o en voz baja para sí mismos. Esta es una historia que enseña, a través del heroico viaje de Harrold, que compasión es coraje y que hay poder - poder bondadoso y amoroso - en ser tu mismo."